La masticación es un proceso fisiológico extremadamente complejo que envuelve actividades neuromusculares que dependen del desenvolvimiento  del complejo craneofacial, del sistema nervioso central y de la oclusión dentaria. Sus principales objetivos son fragmentar los diversos alimentos y prepararlos para la deglución y digestión, promover la acción bactericida sobre los alimentos para favorecer el bolo alimenticio, propiciar el desenvolvimiento de los huesos maxilares, y mantener los arcos dentarios con el estimulo funcional (Motta, 2004; Seikel et al., 2005; Mishellany et al., 2006; Van der Bilt et al, 2006; Marchesan, 2009, Marchesan e Silva, 2011).

Puede ser considerada una función aprendida, influenciada por las propiedades de cada alimento, que está íntimamente relacionada con el resto de funciones del sistema estomatognático (en mayor medida con la respiración y la deglución), produciéndose así un equilibrio armónico.

Esta función se va madurando hasta los 12 años, con el establecimiento de la dentición permanente, pero ya a los 3 años es bastante semejante a la del adulto.

Por lo tanto, la masticación es una función de gran importancia que puede encontrarse alterada por distintas causas desde edades muy tempranas, estableciéndose un patrón inadecuado. Esto tiene consecuencias directas, las cuales detallaremos a continuación.

SINTOMAS

  • Dolor en la musculatura orofacial y/o en las articulaciones temporomandibulares.
  • Rechazo de ciertos alimentos.
  • Masticación unilateral o bilateral simultánea con movimientos verticales.
  • Falta de selle labial durante la masticación.
  • Masticación ruidosa.
  • Masticación con exagerada participación de la musculatura periorbicular y del músculo mentoniano.
  • Aumento o disminución del tiempo masticatorio.
  • Necesidad de tomar líquidos para “empujar” la comida.

CAUSAS

  • Problemas dentarios o en las estructuras periodontales.
  • Maloclusiones dentales.
  • Uso de prótesis.
  • Pérdidas dentarias.
  •  Alteraciones musculares y/o en las articulaciones temporomandibulares.
  • Disturbios neurológicos.
  • Respiración oral.
  • Paralisis facial.
  • Cirugías orales.
  • Problemas de tipo oncológico.
  • Síndromes malformativos.
  • Introducción tardía de alimentación sólida.
  • Dietas alimentarias demasiado pastosas, comidas rápidas…
  • Alteraciones posturales.
  • Debilidad muscular.

CONSECUENCIAS

  • Disfunción temporomandibular.
  • Maloclusiones dentales.
  • Problemas digestivos.
  • Problemas psicoemocionales.
  • Falta de sensación de saciedad.
  • Problemas de obesidad.
  • Desnutrición.

TRATAMIENTO LOGOPÉDICO

El logopeda especialista en Terapia Miofuncional Orofacial es el encargado de evaluar, diagnosticar y rehabilitar las patologías de distinta etiología que afectan a las estructuras y funciones del sistema estomatognático (cuello, cabeza y sus cavidades).

Por lo tanto, es el profesional que comprende el mecanismo anatomofisiológico de la masticación en sinergia con el resto de funciones,  y la influencia que tienen sobre ellas los hábitos orales nocivos.

En la práctica clínica contamos con nuevas perspectivas, basadas en evidencia científica, como son la electromiografía de superficie (EMGs) y biofeedback.

La EMGs es eficaz para cuantificar la actividad muscular en el momento de contracción y relajación muscular, así como sobre la amplitud de su actividad eléctrica. Permite así realizar una evaluación objetiva de las funciones del sistema estomatognático y de la musculatura implicada en ellas. El biofeedback posibilita el entrenamiento del reclutamiento coordinado y equilibrado de la musculatura masticatoria durante la función en un menor tiempo de intervención.

El tratamiento aborda desde edades tempranas hasta la edad adulta. Para cualquier duda o consulta, no duden en ponerse en contacto.